Flora y fauna
Los Farallones están habitados por varias especies de mamíferos, desde pequeños murciélagos hasta pumas, panteras, tigrillos, zorros y osos de anteojos. Sobresalen también los marsupiales; cinco especies de primates (mico maicero, mono colorado, chongo, marteja o mico de noche y marimonda); osos hormigueros, perezosos, ardillas, conejo sabanero, nutrias, pecaríes, tatabro, venados, guaguas, guatines, armadillos, cusumbos.
En las zonas más bajas del Parque, entre los 200 y los 1.000 m, hacia la zona del Pacifico, se encuentra la selva húmeda con árboles hasta de 40 m de altura. En el sotobosque se desarrollan hierbas de gran porte, hay profusión de lianas y bejucos leñosos, así como plantas epífitas. Algunas especies características son cargadera, peine mono, gualanday, jigua, aguacatillo, sande, guabo dormilón, cacao silvestre, araño, sirpo y helechos arborescentes. Entre las palmas de este bosque se destacan el taparín, la zancona, la barrigona y las palmas de cera. El Parque ha identificado la presencia de 108 especies de plantas importantes por encontrarse amenazadas a nivel nacional, por su rareza o endemismos. Algunas de ellas son el roble común, el roble negro, el comino crespo, una violeta de flores rosadas, el alma negra.