Arquitectura
Al igual que en todas las ciudades y territorios del Nuevo Mundo, el orden social de Mompox se estableció alrededor de las necesidades religiosas, Jesuitas, franciscanos, agustinos y dominicos, llegaron, primero, a evangelizar y luego a ordenar todos los aspectos de la vida de los pobladores, donde adquirió un carácter especial la celebración de la Semana Santa, una de las mas nobles y tradicionales manifestaciones de la religiosidad de los habitantes de Mompox.
El desarrollo urbano de la ciudad giró siempre en torno a las diferentes iglesias, y en estas se plasmaron con notable maestría las habilidades y creatividad de los constructores, al punto que en ningún otro lugar de la Nueva Granada se manifiesta tal originalidad en las formas y tanto desapego a los cánones rigurosamente establecidos como en las iglesias de Mompox.
En general la organización de las iglesias momposinas es sencilla, con muros de ladrillo y cubierta en madera entrelazada según el tradicional estilo andaluz llamado de par y nudillo; el interior se divide en tres naves separadas por esbeltas columnas en madera. Los rasgos de originalidad de las iglesias se hallan en la fachada y la torre, desde las mas sobrias como San Agustín y San Carlos, con torre de planta cuadrangular, pasando por la hermosa espadaña de la iglesia de San Juan de Dios, hasta la torre de Santa Bárbara, la mas extraordinaria muestra arquitectónica de la ciudad, con su original balcón, que resume en si una gran cantidad de estilos y tenencias caprichosamente entrelazados según la libre creatividad del artesano que la planeo y la construyo. Otras iglesias, como San Francisco y Santo Domingo, se distinguen por su fachada con elementos decorativos también sumados con completa libertad por los artesanos. La Concepción, la iglesia principal, fue reconstruida casi en su totalidad en el siglo XIX.
Las construcciones civiles son escasas en Mompox. Sobresale el llamado Colegio Pinillos, una de las pocas construcciones de dos pisos en la ciudad. Este colegio fue fundado por el acaudalado comerciante Pedro Martínez de Pinillos, con el nombre del Colegio de San Pedro Apóstol, a fines del siglo XVIII. Se caracteriza por la sólida estructura de su claustro con arquerías de mampostería de ladrillo, donde son especialmente notables los arcos rebajados con columnas enanas en el piso alto.
Las casas de Mompox responden al esquema andaluz, donde los espacios se agrupan alrededor de un patio central. Un rasgo muy característico es la duplicación del salón principal mediante un modulo estructural añadido, que permite diversificar la funcionalidad de los espacios interiores. En las fachadas sobresalen las ventanas de rejas de hierro con gran calidad artística, complementadas por las repisas o "panzas" sobre las que se asientan los tejadillos que las cubren, todos con gran variedad de formas y adornos.
Las casas mas notables en Mompox son, en primer lugar, la Casa Baja, que se destaca por su portada barroca única en la ciudad; la Casa de La Marquesa, situada en la Albarrada, y la de La Concepción, con sus soportales o cubiertas que proveen sombra a los caminantes; la Casa de la Familia German-Ribon, donde esta la sede de la Academia de Historia de Mompox y la Biblioteca Publica, y la Casa del Te Deum, donde actualmente funciona un lujoso hotel.
Sin embargo, en todos los rincones, plazas y calles de Mompox es posible encontrar muestras arquitectónicas de impresionante calidad y belleza, que hacen del centro histórico de la ciudad un verdadero remanso de otros tiempos. La ciudad ha seguido creciendo, para lo cual se han adaptado tierras circundantes, pero los habitantes de Mompox son muy conscientes de que sus hitos arquitectónicos del pasado son el mejor legado que pueden dejar a sus descendientes, y aquello que hace a la ciudad única en el mundo.