Flora y fauna
La región del bajo Apaporis incluye un complejo mosaico de tipos de bosques, en concordancia con la naturaleza transicional de su geografía. El tipo de bosque más extenso se encuentra en las colinas onduladas y bajas de suelos arcillosos rojos y amarillos. La altura promedio del dosel es de 25m con árboles emergentes que alcanzan los 45m.
Es una zona rica en especies vegetales, en un área de 1Ha, dividida en 10 parcelas, se encontraron 340 árboles, con DAP (diámetro a la altura del pecho) mayor de 15 cm, incluyendo entre 130 -150 especies diferentes, pertenecientes a 34 familias.
Las antiguas terrazas aluviales dejadas por los regímenes de inundación del Pleistoceno en el Río Apaporis, sustentan un tipo diferente de vegetación donde las palmas de seje o milpesos (Oenocarpus bataua) y yetchas (Micranda spruceana) son comunes. La altura promedio del dosel de este hábitat es mayor (30 m), pero menos diverso que los bosques de las colinas.
Una muestra equivalente a la anteriormente descrita incluye alrededor de 90 especies (en su mayoría diferentes de las especies presentes en colinas) clasificadas en 32 familias, con una composición diferente. Mientras que en colinas la familia con mayor riqueza es Moraceae, en las terrazas la flora está dominada por plantas pertenecientes a la familia Myristicaceae.
Los bosques asociados a las orillas del lago y del río (Igapó o rebalse) son inundados estacionalmente por más de ocho meses al año (marzo – octubre según Díaz Macuna 2008). La altura promedio del dosel es de 23m y la diversidad de especies es menor que en bosques de tierra firme (colinas y terraza). Una muestra igual a las anteriores contiene alrededor de 60 especies, ninguna presente en tierra firme y clasificada en 25 familias. Se infiere que dentro del hábitat la diversidad esta inversamente correlacionada con el tiempo de inundación, es decir que: las áreas bajas que son inundadas por periodos más largos soportan menos especies. En el rebalse, las familias más dominantes son Caesalpinaceae y Euphorbiaceae.
“En términos generales la riqueza florística hasta la fecha conocida para el área sur del resguardo Yaigojé Apaporis (área de la Estación Biológica Caparú) es de 1.017 especies de angiospermas, agrupadas en 88 familias y 407 géneros, de las cuales 158 corresponden a monocotiledóneas y 859 a las que anteriormente se agrupaban dentro de las dicotiledóneas (angiospermas basales y eudicotiledóneas).
En recientes colecciones (Clavijo, en preparación) se encontraron seis especies nuevas para la ciencia, pertenecientes a las familias Costaceae (Costus fissicalyx), Gesneriaceae (Besleria sp. nov.), Melastomataceae (Miconia sp), Myristicaceae (Iryanthera sp.), Piperaceae (Piper sp.) y Sapotaceae (Pouteria sp.). Es importante resaltar que la riqueza de especies y de géneros está concentrada en sólo 10 -12 de las 88 familias totales y que las leguminosas representan cerca del 10% de la riqueza total de especies y géneros” (Tomado de: Diaz Macuna et al, 2008).
Yaigojé – Apaporis es un área rica en especies de fauna, lo demuestra el registro preliminar de 362 especies de aves; 79 especies de reptiles y 73 especies de anfibios; 201 especies de peces; aproximadamente 400 especies de mariposas y varias especies de mamíferos; muchas de las cuales no habían sido reportadas para el país y no se encontraban registradas con anterioridad para otras áreas protegidas del Sistema Nacional de Áreas Protegidas. Mamíferos
El área se encuentra en un estado de conservación tal que favorece el mantenimiento de las poblaciones de fauna presentes en la zona.
En estudios realizados en la Estación Biológica Caparú se registra la presencia de los siguientes primates: Mono Aullador (Alouatta seniculus), Mico nocturno gritón (Aotus vociferans), Uacarí de cabeza negra (Cacajao melanocephalus), el Tití de collar o viudita (Callicebus torquatus), Capuchino de frente blanca (Cebus albifrons), Mono maicero (Cebus apella), Mono churuco (Lagothrix lagothricha) y Mono ardilla (Saimiri sciureus).
El Lago Taraira alberga especies amenazadas de mamíferos acuáticos como el manatí (Trichechus inunguis) y las dos especies de delfines de agua dulce (Inia geoffrensis y Sotalia fluviatilis), y en los ríos Ujca-Vica / Yaunas y el Ugá se reporta la presencia de poblaciones saludables de Nutria gigante o perro de agua (Pteronura brasiliensis); de tal manera, los bosques inundados por aguas negras de estos sitios son de gran importancia para la conservación de éstas especies. Estudios realizados por Conservación Internacional Colombia, en áreas sin incidencia de caza, sugieren que hay una baja densidad de grandes vertebrados como el jaguar (Panthera onca), el tigrillo (Felis pardalis), el puma (Felis concolor), el tapir o danta (Tapirus terrestris), las tres especies de osos hormigueros (Myrmecophaga tridactyla, Tamandua didactyla y Cyclopes dydactylis), y las dos especies de venado (Mazama americana y Mazama gouazoubira); esta baja densidad puede deberse a la baja fertilidad de los suelos que trae como consecuencia la baja productividad de los bosques.
Reptiles, anfibios y peces:
En 2003, Sandra Correa de la Fundación Tropenbos Colombia, realizó una exploración de la Ictiofauna del Lago Taraira, Bajo Río Apaporis. En ésta, la investigadora reporta la presencia de 121 especies distribuidas en 10 órdenes y 21 familias. Actualmente, se adelanta una caracterización de la herpetofauna en la Estación Biológica Caparú
Aves:
El área de ecosistemas de transición declaradas como área protegida es importante para la conservación de las aves, porque permite sustentar los grandes requerimientos de área de dominio vital de grupos como los rapaces (águilas, halcones y búhos entre otros), guacamayos (Ara spp) y crácidos (paujiles y pavas).
También es especialmente importante para las aves migratorias, que usan el área de manera estacional para el desarrollo de alguna parte de su ciclo vital. Tal es el caso del zorzalito de swainson (Catahrus ustulatus) y el playero manchado (Actitis macularius), aves migratorias del hemisferio norte; y tijeretas sabaneras (Tirannus savana) y golondrinas (Progne modesta) migratorias del hemisferio sur; también hay presencia de aves migratorias de distancias más cortas que aprovechan la oferta de recursos del área, como: guacamayos (Ara spp) y grandes contingidos (pájaros paraguas).